Mercadillo

¡Hay que ver cómo somos las mujeres! anoche viví un capítulo.....

Quedé con una amiga para tomar algo y decidimos ir a Lavapiés. Entramos a un bar al que solemos ir de vez en cuando. Al entrar vimos que estaba lleno de mujeres con maletas y con mucha pinta de teatreras. ¡Actrices! pensamos... Y cuando estabamos a medio poleo-menta se sube una de ellas al miniescenario y grita: ¡Comenzamos el mercadilloooooo! y todas gritaban enfurecidas: ¡Opto, opto!

Mi amiga y yo nos mirábamos sin saber si era una performance, una obra, un monólgo...no sé. Entonces la chica empezó a sacar ropa de las maletas y para obtener una prenda que te gustara sólo tenías que gritar: ¡Opto, opto! y te la lanzaba, totalmente gratis. El precio era que si había más gente que optaba, pues se la probaba y a la que mejor le quedara...pues se la quedaba.

Total, que la cosa se calentó y aquello era un gallinero! Comenzó a entrar gente al bar y a animarse la cosa... que espectáculo! Digno de ver! Ya sé la sensación que se tiene el 8 de enero en la puerta del corte inglés!
Hasta había actrices de series de televisión deshaciéndose de su ropa de juventud! Fue muy, muy divertido! ¡Una idea estupenda para desecharte de toda tu ropa y saber que cae en buenas manos. Yo me llevé cosas que estaban muy bien y mis amigas ni te cuento ( digo mis amigas porque las llamamos por teléfono para que vinieran corriendo,imposible de perder!)

Lo mejor de todo es que quedé con mi amiga para contarle mis penas y no me dió tiempo, las chicas del mercadillo me hicieron reir, por un momento se me olvidaron algunas cosicas, así que... ¡Gracias a las mercadilleras!